Primer día
Ringggggggggggg, Rinnnggggggggggg… Este sonido es el despertador, suena
como cada mañana, pero hoy tiene otro tono, tiene sonido de
vacaciones. Hoy toca empezar a
disfrutar de la ciudad de Berlín. Empezaremos el día con una de las visitas más especiales que podemos hacer en esta ciudad, el Muro de Berlín.
Esta es una de las visitas que más ganas tenemos de hacer, una de esas cosas que sabes que algún día verás, pero hasta hoy no había llegado el día.
Al principio, mientras nos acercábamos al Muro de Berlín, hemos tenido muy claro donde empezaba, ya que hemos ido viendo una “especie” de muros con graffittis, hasta que después por fin hemos visto las imágenes que tantas veces hemos podido ver en reportajes sobre el muro de Berlín.
Esta es una de las visitas que más ganas tenemos de hacer, una de esas cosas que sabes que algún día verás, pero hasta hoy no había llegado el día.
Al principio, mientras nos acercábamos al Muro de Berlín, hemos tenido muy claro donde empezaba, ya que hemos ido viendo una “especie” de muros con graffittis, hasta que después por fin hemos visto las imágenes que tantas veces hemos podido ver en reportajes sobre el muro de Berlín.
Han pasado casi dos horas desde que nos pusimos a observar el muro, hay cantidad de graffitis, todos ellos impresionantes y verdaderas obras de arte.
El cielo está bastante nublado, pero de
momento sigue sin tener pinta de llover, así que aprovechamos y llegamos
hasta el puente Oberbaumstrasse.
Caminando, caminando nos encontramos con el Reloj del Mundo, aquí decidimos entrar a una cafetería a tomar un tentenpié y coger fuerzas para continuar el viaje.
De aquí nos vamos en busca del hotel Radisson Blue de Berlín.
Y la verdad es que tardamos un buen rato en encontrarlo, aunque está
justo al lado de la Catedral y allí estamos un buen rato admirando el
acuario que tienen en la recepción.
Ahora, nos vamos a la Catedral de Berlín, para visitarla ahora que vemos que no hace mal tiempo y podremos aprovechar las vistas desde la cúpula de la Catedral de Berlín.
Después de estar aquí arriba, tenemos que decir que es una de las ciudades que menos nos ha gustado desde las alturas. No decimos que sea fea, porque no lo es pero es un tanto fría y desierta.
De aquí nos vamos directos al barrio Nicolai de Berlín, aquí comemos ya un poco tarde por cierto, y antes de ponernos en camino hacía la
Puerta de Brandenburgo, nos deleitamos un rato entre las calles del
barrio, donde aprovechamos a comprar alguna cosilla…
A continuación, pasamos otra vez por la
Berliner Dom y a estas horas de la tarde, tiene un encanto especial…la
luz empieza a ser mucho más tenúe y empieza a envolverla, dándole un
halo especial.
Segundo día
Hemos recorrido algunos de los 2711 bloques que forman el monumento al
Holocausto y aunque habíamos leído en varios sitios
que había mucha gente que se quedaba indiferente ante el monumento a
nosotros no nos ha pasado esto. Mientras lo íbamos recorriendo algo en
nosotros nos iba recordando lo que significaba. La verdad que la sensación de "pelos de punta" no nos la quita nadie!
Seguimos y nos vamos directos al Reichstag que está a menos de 5 minutos andando y
seguimos una pequeña cola, enseñamos los pasaportes, pasamos por un par
de arcos de seguridad y algunas cosas más, antes de conseguir nuestra
audio guía en español para visitar la cúpula del Reichstag y para dentro
que nos vamos!!
Continuamos dirección Museo de Pérgamo.
Aquí pasamos casi 3 horas, la idea era estar un poco menos, pero ante tantas maravillas no podemos resistirnos. La verdad que el museo nos parece una auténtica pasada.
Aquí pasamos casi 3 horas, la idea era estar un poco menos, pero ante tantas maravillas no podemos resistirnos. La verdad que el museo nos parece una auténtica pasada.
Después de un buen rato sólo paseando, decidimos que es el momento de cenar.
Y allá que nos vamos en busca de un restaurante, decidimos aprovechar esta última cena en uno de más calidad que los anteriores.
Ya cenadas, nos vamos a la estación de autobuses donde previamente habíamos dejado las maletas y ya desde aquí cogemos el bus que nos lleva al aeropuerto.
Bueno... un viaje más, quizá no el más recomendado en cuanto a bonito pero sí uno de los más interesantes por la historia que lleva detrás.
¡Fantástica recomendación!
ResponderEliminarLlevo tiempo queriendo visitar esta ciudad y ahora me habéis dado aún más ganas de visitarla.